1. Next Victim
2. Disrespected
3. Dictator
4. One Horse Town
5. Throw Up Inside
6. Sex, Drug N Rock Roll
7. Bittersweet
8. Losin' Crontol
9. Two Faced Man
10. Fade To Brown
Ya llevamos un tiempo dándole a la oreja con el debut de Bronze, banda de Colorado que practica un hard rock con un regusto grunge y con reminiscencias de grupos como Queen Of The Stone Age. Aunque esa sea la descripción rápida, la verdad es que estamos ante un hard rock que hunde sus raíces en ese genial protoheavy de los 70. Ese sonido añejo que mezcla blues, rock y, bueno, Black Sabbath, da buena cuenta del nombre que estos estadounidenses, con toda intención, se han puesto: Bronze.... metal, sí, pero no acero. La verdad es que no importa demasiado la etiqueta, lo mejor es disfrutar este gran disco de diez canciones clásicas y modernas a un tiempo, siempre que lo de moderno lo entiendas referido a los 90, claro. Después de todo, ellos mismos citan a bandas como Thin Lizzy entre sus influencias, aunque yo debo admitir que no las veo demasiado.
Recientemente han sacado su segundo disco, llamado Snake Oil, y cuando digo recientemente me refiero a septiembre de este año. No tenemos mucha información de este nuevo trabajo, ni tampoco sabemos si seguirán utilizando licencias libres, pero el caso es que nos basta y nos sobra con este primer LP, de hace ya tres años, para disfrutar del buen rock.
El disco como decíamos cuenta con diez canciones, y la encargada de abrirlo es Next Victim, un tema impactante y adictivo, caracterizado por un medio tiempo martilleante que cumple perfectamente su función de hit inicial. Disrespected no hace sino mejorar las cosas, añadiendo más rapidez y empuje a un tema marcado por un riff completamente setentero y pura actitud en las líneas vocales. Dictator arrastra las guitarras por sus tres minutos de duración, avanzando con su distorsión "vintage" entre ritmos entrecortados, donde los fraseos "Made in Black Sabbath" tienen también su papel.
Con One Horse Town llega el momento de las influencias más blueseras. Se trata de un tema denso, diría que un blues-stoner de guitarras pegajosas y mucho "fuzz" en el sonido, haciendo uso de solos pentátonicos con abundante wah wah, algo que por lo demás se repite en muchas otras canciones.
Throw Up Inside sigue deleitándonos con el medio tiempo oscuro, que es la seña de identidad de todo el disco, pero esta vez tenemos algo mucho más directo y setentero -con una cadencia más propia de unos The Cult cualquiera, para entendernos-. Me quedo con el sensacional puente de la canción, amén del parón que se produce a mitad de duración, tras el cuál aparecen de invitados Deep Purple y Black Sabbath a un tiempo. Sin duda es de los mejores de todo el disco. Algo más intrascendente resulta el tema siguiente, Sex, Drugs, Rock n' Roll, que destaca por lo musical más que nada, ofreciéndonos el repertorio más grunge de todo el LP. Las voces se limitan a repetir el lema del rock and roll.
Con esto llegamos a Bittersweet, típicamente stoner, facilona pero efectiva, con las líneas vocales muy saturadas. La cosa mejora ostensiblemente con Losin' Control, que nos pone a mover el pie con este corte más vacileta y rápido. Y ello pese a que nunca se olvidan las distorsiones bien graves. Este apretón de acelerador llega en el momento justo.
El disco prosigue sin demasiada novedad con Two Faced Man, salvo quizás por unas guitarras más cortantes y unos estribillos más marcados. Es otro tema bueno pero sin tanta chicha como otros anteriores. Y con esto llegamos al momento final: Fade To Brown nos deja un muy buen sabor de boca, mezclando para la ocasión pasajes típicamente grunges muy densos, y firmando con ello una de las mejores canciones de este Bronze.
La verdad es que creo que estamos ante un disco típicamente stoner, pero al mismo tiempo muy variado -algo que no suele suceder tan a menudo en este palo musical- y con mucha raíz clásica. Por eso resulta entretenido no solo para los amantes de la oscuridad, sino también para los fans del rock duro clásico sin más. Es cierto que canciones como Two Faced Man o Bittersweet baján un poco el pistón, pero en general el repertorio no decae y se puede decir que el disco está muy equilibrado. Vamos a ver qué nos depara su nuevo Snake Oil
LICENCIA
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