1. Still Smokin
2. Blackwing Butterfly
3. Watch the Burn
4. Three Blocks
5. Hooked
6. Sick
7. Man Of Sorrow
8. Zombie Baby
9. Broken Home
10. Father
Si en nuestra reciente editorial decíamos que no encontrábamos mucho hard rock americano con copyleft, aquí están presentes Sekshun 8 para enmendar la plana con su primer disco, llamado Black Winged Butterfly. La formación de Norfolk hace ese tipo de hard rock heavilizado "post-grunge" de mediados/finales de los noventa que, a día de hoy, tiene ya un sonido clásico, por mucho que decir esto en 2000 provocara que más de uno torciera el gesto. Y es que ese sonido de los "Loads" de Metallica o de grupos como Godsmack se ha acabado ganando todos mis respetos con el paso del tiempo. Gustos aparte, personalmente creo que este estilo ha envejecido bien, y en parte lo ha hecho porque siempre hundió sus raíces en el hard rock clásico, pese a tener el marchamo de "alternativo" o "moderno". Sekshun 8 bebe sin disimulo de esas influencias, firmando un trabajo muy serio, compacto y profesional. Lo que quizá no tengan de originalidad sí que lo ganan, desde luego, en calidad y, por supuesto, en personalidad.
Las referencias a los Load se ven claras nada más arrancar el LP con Still Smokin, uno de los temazos del disco sin duda. Estrofa de hard rock clásico a más no poder, cierto tufo a Black Sabbath... y por supuesto ese estribillo que bien podría haber cantado un James Hetfield. En mi opinión la cosa mejora todavía más con la llegada de Blackwing Butterfly y sus guitarras-apisonadora, que solo ceden para dejarnos que un estribillo con un gancho enorme nos pegue el subidón definitivo.
Watch The Burn nos lleva a terrenos de hard rock estándar altamente pegadizos, y quizá se trate del tema más festivo de los diez que componen el LP. Genial el detalle de esos coros "cheerlader" que se dejan oír. Three Blocks es altamente "rítmica" en las voces, con un sensacional trabajo de guitarras: vaya colección de riffs y vaya unos fraseos de wah wah más buenos. Sin duda que ocupa el podio del disco, me extraña que pueda dejarte indiferente. ¿Lo ves? Ya has movido el pie.
Llegamos al momento más "post-grunge" con Hooked, una semibalada oscura con toques acústicos, donde una voz quebradiza y quejumbrosa nos cuenta unas cuantas penas. Me ha parecido un muy buen punto de inflexión y personalmente me encanta el tema. En esas estamos cuando el disco vira hacia una mayor "densidad" sonora, volviéndose un poco más flemático. Primero con Sick, un medio tiempo un tanto hipnótico, buena canción aunque quizá más intrascendente y sosa, al menos comparada con las anteriores; después con Man Of Sorrow, la siguiente a la escucha, que mete un poco más de nervio y pegada aun con la aparición de paisajes sonoros un poco más lentos en los que aparece una voz femenina invitada, que me ha gustado bastante.
Por su parte, Zombie Baby nos retrotrae a un sonido añejo y sureño, aunque añadiendo a la mezcla el medio tiempo pesado y lento, ligeramente stoner. El resultado es otro tema oscuro, que nos deja una sensación de inquietud. Esto último se repite con Broken Home, presidido por unos riffs con mucha fuerza y uso de graves a reventar que nos machacan con su ritmo de medio tiempo y un deje decididamente Godsmack. Y terminamos con Father, que sube el pistón -eso sí, tras su intro depresivo-infernal- firmando un tema más movido y agresivo, pero que no nos permite quitarnos de encima ese aire siniestro, como de desasosiego.
Hard rock, heavy metal, stoner, alternativo... probablemente estemos ante una mezcla muy conseguida de esas cuatro cosas. Como he dicho antes, la segunda parte del disco tiene una onda diferente a la primera mitad. Yo personalmente me quedo con esa primera mitad sobre todo, aunque todo el LP merece la pena si tienes las orejas bien abiertas.
LICENCIA
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